Viernes, 13 Septiembre 2019 14:13

Fiesta de San Pedro Julián Eymard en La Mure

Cuatro jornadas soleadas del 1 al 4 de agosto han sido propuestas para honrar y seguir el camino de vida del padre Eymard, para reavivar y alimentar nuestra fe, en el corazón de su tierra natal.

Jueves 1 de agosto

Marcha tras las huellas del Padre Eymard en Nuestra Señora del Laus.

En Nuestra Señora del Laus, María aparece en la sencillez a Benoîte Rencurel, joven y pobre pastora, y le pide en el silencio de ese lugar, edificar una capilla para la conversión de los pecadores. El padre Eymard, muy joven, va al Laus; será para él su peregrinación privilegiada. “Es ahí donde por primera vez, conocí y amé a María (CO 119). Allí María es tan madre, tan buena, tan entrañable” (CO 260). Allí va para descansar, hacer un retiro, reflexionar sobre sus misiones y pedir las gracias particulares. Es finalmente en Laus donde el padre manda depositar las constituciones de su Fundación.

Siguiendo al padre Eymard, somos 25 peregrinos subiendo al Laus para una marcha al Paso del Ángel, en Pindreau- lugar de la aparición- y a la capilla de la Preciosa Sangre. Se celebró la misa al aire libre. Es naturalmente el tema de la reconciliación el que nos ha ocupado y un cuadernillo ha guiado nuestra reflexión, pautada entre otros con los textos del padre Eymard:

Todas las generaciones me llamarán bienaventurada (Luc 1,48). El Laus, peregrinaje famoso. Todo inspira; el país: descripción, es la preparación, es el desierto para llegar a la tierra prometida. Característica de esta peregrinación. Las primeras en el comienzo, una característica de sencillez, de pobreza, de retiro, una característica de penitencia, para venir y vivir, y sufrir, una característica de devoción particular, la devoción de la pastora, una característica sorprendente de conversiones, de milagros espirituales- de renovación interior- una característica de milagros corporales. Una característica de alegría. Se llega aquí con prisa, se queda uno sin languidez, parte uno con pesar”. (PG 190,1).

Viernes, 2 de agosto

Vigilia de oración- Exposición del Santísimo Sacramento

El padre Eymard apreciaba la belleza de la tierra, viendo en ella a Dios en todas sus manifestaciones. Por la tarde una vigilia de oración, sobre la obra divina de la Creación ha sido animada de una manera muy bella, llena de profundidad y de sensibilidad, alternada por beneficiosos silencios. La actualidad del tema nos recuerda que nuestro planeta necesita nuestra mirada benevolente, nuestro respeto y nuestra protección, pero demos lugar a la admiración y a la oración con palabras del p. Eymard:

“Esos astros magníficos que adornan el firmamento… es Dios quien los ha creado…¿qué poderoso es! Que los ha creado para mi…¡qué bueno es! Bendigámosle. “Admiro esas montañas, su majestad, su utilidad, su riqueza. Es Dios quien las ha hecho… para mi, para servirme de peldaño para subir al cielo. ¡Qué poderoso es!...¡Qué bueno es! ¡Bendigámosle! “Veo ese río que pasa, va a desembocar en el océano. Ese río me dice de parte de Dios que mi vida es un rio. Mi océano es Dios en la eternidad ¡Bendigámosle! ¡Qué bella es la naturaleza en los hermosos días de la primavera: ese verdor lleno de esperanza, esos miles de flores, imagen de la belleza de Dios… ¡Qué rica es la tierra, admirad su frutos, es la mano de Dios quien la ha fecundado y para mi…”¡Bendigámosle! “Ese concierto admirable de los pájaros, es Dios para alegrarme en el exilio; les ha puesto entre el cielo y la tierra para que me recuerden el concierto de los ángeles, la patria celeste” ¡Bendigámosle!

Sabado, 3 de agosto

Adoración por la paz e indulgencia plenaria

La indulgencia plenaria había sido concedida por el Papa Francisco, por petición de nuestro Obispo con ocasión de los 150 años de la muerte del padre Eymard. La indulgencia plenaria es puro don gratuito de la divina misericordia. Se inscribe en una iniciativa de fe, interior, personal como una peregrinación. La jornada sugiere un tiempo para la reconciliación, un tiempo de adoración en la capilla, lugar de memoria dedicada a San Pedro Julián Eymard, un tiempo de recogimiento sobre su tumba, así como una profundización del conocimiento de su vida (proyección de un DVD)

La adoración por la paz está propuesta para cada primer domingo del mes en la capilla del padre Eymard.

Domingo, 4 de agosto

La Eucaristía

El domingo fue día de fiesta con una misa única para nuestra parroquia, presidida por el padre José Antonio Rivera Ruiz, vicario general, asistido por el padre Nino Donda, nuestro párroco, y concelebrada por numerosos religiosos del Santísimo Sacramento a los que queremos dar efusivamente las gracias. Esos momentos de convivencia y de comunión reconfortante nos comprometen a renovar nuestra vida siguiendo a Jesús.

Clausuramos esta hermosa fiesta reunidos en una comida y en un ambiente muy agradable.


Señora Brigitte Cassard
Centro de Espiritualidad y Parroquia SPJE