La Conferencia africana (CA) reagrupando las Provincias/Regiones de la Congregación del Santísimo Sacramento en África ha tenido lugar del 25 al 30 de noviembre de 2019 en Brazzaville, en la comunidad del postulantado en el Barrage.

Los participantes fueron los siguientes:

Por Uganda: p. Roel Dela Cruz, superior provincial de Filipinas, p. Alde Bureros, ecónomo provincial, p. Georges Ssali, director del postulado en Jinja.

Por Mozambique: p. Geraldo Bernardo Uaiare, superior de Maputo.

Por el Camerún: p. Domenico Avogadro, superior provincial de Italia, p. Nicaise Milandou Semo, responsable en Yaoundé.

Por el Senegal: p. Raphael Diop, ecónomo provincial, p. Abraham Faye, maestro del Noviciado Interafricano en Koudiadiène.

Por el Congo-Brazzaville: p. Brel Gustinau Malela Daouda, superior regional, p. Rodolfo Mboya, ecónomo regional.

Por el Congo-Kinshasa: p. Anaclet Bambala, superior provincial, Hno Michel Lukikeba, ecónomo provincial, p. Jean Willy Mupila, director del Escolasticado Interafricano en Kinshasa, p. Augustin Mfwankama, ecónomo del Escolasticado Interafricano.

Por la Curia General: p. Castigo Agostinho Maholele, consejero general encargado de África, p. Philip Benzy Romician, ecónomo general.

La asamblea se desarrolló en dos fases: dos días para tratar las cuestiones específicas de la vida de la Congregación en África, en particular, la formación, y tres días de formación sobre las cuestiones económicas y financieras. Los trabajos se iniciaron con una misa solemne celebrada el domingo 24 de noviembre de 2019 en nuestra iglesia parroquial San Pedro Claver de Bacongo. La Eucaristía fue presidida por el p. Brel Gustinau Daouda Malela, presidente en ejercicio de la CA, concelebrada por los delegados a la CA. Al final de la celebración una comida fraterna nos congregó en la comunidad regional en San Pedro Claver.

Los trabajos en sala comenzaron el lunes 25 de noviembre con una comunicación sobre el tema: “Cómo luchar contra los abusos a menores y personas vulnerables?”, presentada por la Hermana Angela, Hija de la Caridad. En su exposición, ella ha recordado que somos todos abusadores en potencia. Ha citado el texto de San Lucas para indicarnos la urgencia de una concienciación: “Si no os convertís, vosotros pereceréis como ellos” (Lucas 13, 1-9) Por consiguiente, la protección de los menores y de las personas vulnerables es un deber que incumbe a todos. Es una cuestión de supervivencia de nuestras Congregaciones y de la Iglesia. Siguiendo a las personas y a las instituciones que se han distinguido en la protección de los menores y de las personas vulnerables, estamos todos invitados a un compromiso personal y comunitario.

Como intento de solución, la conferenciante invitó a la asamblea a la concientización, al respeto de las normas, a la formación adecuada, a la vigilancia por parte de los superiores, a la prudencia y a la resistencia a la tentación, a la elaboración de normas de conducta y de sanciones en la materia, a la sensibilización, etc. Esas ideas han sido reforzadas por el p. Domenico Avogadro quien ha recordado que el abuso sexual siempre va acompañado por el abuso de conciencia y de poder. Y con respecto al carisma de nuestro fundador (Dejaré todo por los sacerdotes), la Congregación debería prepararse para asegurar un eventual acompañamiento para con los sacerdotes envueltos en sanciones relativas a los abusos.

Tras esta comunicación, los delegados se han ocupado sobre algunas cuestiones en relación con la vida y el futuro de nuestras casas de formación (Noviciado y Escolasticado), de nuestra colaboración entre implantaciones africanas y con las Comisiones generales de formación y de finanzas. Una puesta a punto del p. Agostinho ha clarificado las expectativas de una asamblea que se sitúa en la línea del tema principal del último Capítulo General: “Sobre la fracción del pan: familia, don de sí, misión”. A continuación presentó el mensaje del Superior general, p. Eugênio Barbosa Martins, a la Conferencia Africana.

Las reflexiones y los informes seguidos de intercambios, han generado resoluciones que resumimos aquí: la disponibilidad de la CA para acoger a los escolásticos provenientes de otras conferencias de la Congregación.

Colaborar con el Consejo general para asegurar la gestión y la presencia en esta parroquia. En cuanto a la formación:

• animar a los jóvenes en formación a componer trabajos sobre el fundador y a los religiosos que puedan a emprender una línea de especialización.
• estimular sobre la formación específica SSS en el Escolasticado Interafricano y reforzar el desarrollo en los jóvenes en formación del sentido de pertenencia a la Congregación y de la comunidad de vida.
• Para hacer perenne la acción formadora en nuestras estructuras de formación, la CA propone las iniciativas para la formación de formadores para que ellas sean capaces de proponer formadores cuando lo exijan las necesidades,
• Por otro lado, es con vistas a una mejor preparación a los ministerios que la CA ha recordado a sus miembros el respecto a los tiempos necesarios y canónicos requeridos en la admisión de los candidatos a las órdenes sagradas, tras el programa de preparación a la profesión perpetua (P4)

Otras preocupaciones han sido también objeto de nuestra reflexión, a saber: el aprendizaje de los idiomas oficiales de la Congregación que son el francés y el inglés (en algún caso el español, el italiano) que deben ser privilegiados desde el noviciado y el escolasticado; promover la internacionalidad, dada la evaluación positiva de las experiencias en curso de candidatos africanos fuera de la CA (en Canadá, Colombia, Filipinas, Sri Lanka). Para reforzar esas experiencias, la CA se compromete en cada implantación a preparar a los jóvenes desde el comienzo para abordar las culturas extranjeras.

Otro momento destacado en el encuentro de Brazzaville ha sido dedicado a la formación de los ecónomos de la CA durante tres días. Es el ecónomo general, p. Philip Benzy Romician, asistido por el consejero encargado de África, quien ha ayudado a los ecónomos de la provincia/región y a las entidades de formación a comprender los nuevos retos de la gestión económica y financiera en la Iglesia en general, y en la Congregación en particular.

Partiendo de las recomendaciones de la Iglesia presentadas en el documento “La economía al servicio del carisma y de la misión” publicado hace algunos años por la CIVCSVA, el ecónomo general ha recordado los principios de una gestión sana, enraizada en las Sagradas Escrituras. Por medio de soportes audiovisuales y de intercambio de reflexiones ilustró a la Asamblea sobre los límites de los ecónomos (falta de formación adecuada) y sobre los valores que hay que promover (la imitación de Cristo pobre y libre, la transparencia y la responsabilidad). Paralelamente, han sido abordados la totalidad de los parámetros de una gestión sistemática y profesional. Se ha lanzado, pues, una llamada a los ecónomos y a los superiores para aprender a utilizar los instrumentos de gestión y de control que la ciencia y la iglesia nos ofrecen.

Al término de esta formación, la asamblea de la Conferencia Africana se ha clausurado y nos hemos dado cita, para un próximo encuentro, en noviembre de 2020, en Senegal.

Padre Nicaise Milandou Semo, sss
Secretario de los trabajos