Por John Thomas J. Lane SSS
Highland Heights, Ohio, EE.UU. - Provincia de Santa Ana
Un proyecto para el 40o aniversario de la Regla de Vida para la Comisión Teológica Internacional y SSS International
En la celebración del 50o aniversario de la Provincia de Santa Ana en la Diócesis de Cleveland, Ohio, en 1981, la Parroquia de San Pascual Bailón (SPB) en Highland Heights, Ohio (fundada por los SSS en 1953), acogió una celebración extraordinaria con el estreno de una pieza musical titulada Unless You Become (A menos que te conviertas), del famoso compositor litúrgico Alexander Peloquin. Mientras esperaba la actuación en la iglesia, vi ejemplares de la "Regla de Vida ad experimentum" (RdV) en los bancos. Leí con gran emoción este documento, diciéndome a mí misma: "Señor, me estás atrayendo a esta vocación y a esta Congregación religiosa, ¿verdad? Esto es hermoso, ¡¿y para mí?!".
Leí con interés los números 40 y 41 de la RdV - todavía me acuerdo. Había participado en la liturgia de mi parroquia desde que era monaguillo y músico (a los 8 años). Me encantaba el ministerio activo de la parroquia y la implicación de mis padres: formaban parte del Consejo Pastoral (mi madre era secretaria y redactó las directrices), participaban en los retiros de “Cristo renueva su Parroquia”, los lectores servían como ministros de la Comunión y fueron los fundadores de la Comisión de Liturgia. La Comisión de Liturgia de nuestra parroquia se reunía en las casas de los feligreses, ya que no había suficientes salas de reuniones. Muchas veces, nuestras reuniones empezaban con una "Misa en casa". Yo tocaba y cantaba la música para la Eucaristía y disfrutaba de la comida que seguía.
Habiendo tenido un curso de escritura en la escuela secundaria sobre la Eucaristía, sentí que estábamos viviendo esto como parroquia a través de la visión de la nueva RdV. Así que, cuando leí estos números consecutivos de la RdV, sentí que Dios me llamaba fuertemente a vivir la vida como "Apóstol de la Eucaristía" con esta RdV y a unirme a la Congregación que estaba viviendo esta RdV en mi parroquia. Posteriormente, todos sabemos cómo la RdV ha guiado nuestro ministerio, nuestros diversos talentos y dones, y nos ha llamado a ver nuestras parroquias y santuarios como centros eucarísticos, viviendo todos los misterios de la Eucaristía.
¡Estos dos números me siguen guiando! Es difícil creer que hace casi 25 años terminé mi licenciatura en liturgia para el servicio a la Congregación y a la Iglesia. Esta RdV me inspiró para estudiar, escribir y continuar compartiendo los dones de la teología litúrgica y eucarística de diversas maneras. Estos números de la Regla de Vida guían a los miembros de la Congregación a abrazar la teología litúrgica y eucarística actual e incorporar estos elementos dondequiera que sirvamos.
Es difícil creer que durante 31 años he sido sacerdote sirviendo en parroquias y, durante 25 de esos años, párroco. Basándome en el número 41 de la RdV, he recibido la guía y el mandato de hacer de nuestras parroquias SSS los “lugares de anuncio y de vida evangélica, lugares de oración, de adoración eucarística y fiesta, lugares de compartir y de comunión, lugares de libertad y de promoción del hombre”. El número 41 de la RdV me ha guiado para colaborar con la gente de nuestra parroquia; como feligrés que crecí en San Pascual, vi estos valores en acción.
A lo largo de mis años como párroco, he compartido selecciones de la Regla de Vida en nuestro boletín parroquial. Han disfrutado, se han inspirado y han visto por qué nosotros, los miembros de la Congregación, servimos como lo hacemos. Todavía me inspira, más de 40 años después, desde aquella primera lectura aquella noche en el banco de la iglesia:
Buscamos… expresiones mejor adaptadas a las necesidades de los fieles, para que toda celebración llegue a ser experiencia de fe y fuente de compromiso (RV 40).
Haremos de nuestras parroquias auténticas comunidades como modeladas por la Eucaristía, fuente y centro de su vida (RV 41).
Sábado, 29 de julio de 2023
Memoria de los Santos Marta, María y Lázaro
